Aquí tenéis la carita de mi niño. ¿A que es monísimo y se parece a su madre? Bueno, qué os voy a decir, que me he emocionado mucho con la foto en la mano. Es que todavía no me hago mucho a la idea de que tengo un chiquinino creciendo aquí dentro, a pesar de la barrigota, la ciática y las patadas. El pequeño Antolín pesa 1,770 kg y tiene el peso y medida perfectos para su tiempo (31 semanas). Todavía me quedan dos meses hasta finales de junio, pero ya me voy haciendo una idea.Bueno, esto excusa el abandono que le tengo a mi blog, ¿no?
Y su afanoso sueño
de sombras, otra vez, será el retorno
a esta corporeidad mortal y rosa
a esta corporeidad mortal y rosa
donde el amor inventa su infinito.
(La voz a ti debida, P. Salinas)

4 comentarios:
Joder, se ve la cara perfectamente!! Me alegro de que todo vaya bien y dile al pequeño que tampoco engorde mucho, que luego tiene que doler mucho cuando salga, jajajaja.
AHYYYYYYYY, MI SOBRI!!!!!
A mi me parece verle como una perilla!!
¿Sí? Pues será rubia...
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